Una de las mayores amenazas para un buen desarrollo económico y social en el futuro es sin duda alguna el daño ambiental. El consumo excesivo de plásticos derivados del petróleo y la gran cantidad de desechos generados por dicha práctica ha puesto en alerta a diferentes sectores de la sociedad. Por lo que, no es de sorprendernos que científicos, ingenieros, arqueólogos e incluso influencers compartan constantemente información sobre el diseño y las diversas aplicaciones de materiales creados a partir de fuentes naturales. Bolsas biodegradables, textiles libres de compuestos tóxicos, envases y empaques BIO, cada uno de estos productos tienen algo en común, el uso de biopolímeros, los cuales son potenciales candidatos para mejorar la relación entre el consumo de artículos de primera necesidad y el ambiente.